Ex Hacienda Anicabil, hermoso sitio recreativo

La ex hacienda Anicabil es, desde el 2009, un hermoso parque lleno de árboles y algunos vestigios de sus antiguas funciones tanto en la época prehispánica como en la colonial.

Los vecino suelen llevar ahí a los niños y sus mascotas para pasar una tarde agradable corriendo, manejando bicicleta o disfrutando de sus bancas bajo la sombra de los grandes árboles.

Ubicación

Una hacienda que no fue henequenera

Antes de la época colonial, los terrenos de Anicabil fueron parte de un asentamiento maya que existió entre el preclásico tardío (400/300 a.C.-250 d.C.) hasta principios del posclásico (1100-1532 d.C.).

A mediados de la Colonia el asentamiento prehispánico fue desmantelado, y en el siglo XVIII fue levantado el casco de la hacienda.

Durante esta época la hacienda Anicabil se dedicó a la producción de carne, cueros, miel, cera de abeja, frutos y hortalizas. Los productos eran enviados a la ciudad de Mérida, pero luego de la guerra de castas pasó a formar parte de la hacienda henequenera de Susulá.

Hoy en día aún se conserva la casa principal, que no es muy grande, y destaca por estar construida sobre un antiguo basamento maya de aproximadamente 30 metros de largo y 12 de ancho.

También se pueden ver una noria, el abrevadero, canales de agua y el arco de la entrada principal.

La hacienda llegó a contar con el sistema de transporte llamado “Truck”.

Aquí te dejamos algunas fotografías del lugar captadas por la lente de Carmen López – @cllcabrera19a19:

Publicado por Blúneid

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