Ubicada en la costa norte de la península de Yucatán, Xcambó fue un centro estratégico de comercio y producción durante la época prehispánica. Su nombre, de origen maya, se traduce como “Cocodrilo Celestial” o “Lugar donde se realizan trueques”, haciendo alusión a su relevancia como punto de intercambio y abastecimiento.
Un asentamiento estratégico en un petén
Los habitantes de Xcambó eligieron asentarse en un petén, una zona elevada rodeada de ciénegas, que ofrecía recursos esenciales como agua potable, alimentos y materiales de construcción. Esta ubicación estratégica facilitaba la comunicación a través de la ría y la conexión con otros asentamientos, tanto costeros como del interior.





El sitio destacó por su papel como puerto comercial durante el periodo Clásico Temprano (250-600 d.C.), siendo un punto clave para la administración de salinas y productos marinos, así como para el intercambio de bienes a nivel local, regional y supraregional. La construcción de sacbés o caminos blancos conectó a Xcambó con otros sitios mayas como Misnay, Ucí e Izamal.
Un legado arquitectónico único
A lo largo de su historia, Xcambó experimentó varias etapas arquitectónicas, con influencias notables del estilo Petén y el llamado Megalítico o Izamaleño. Las construcciones tempranas del sitio se caracterizan por pirámides de cuerpos escalonados, esquinas redondeadas y grandes bloques de piedra utilizados en muros y escalinatas. Ejemplos destacados de esta arquitectura son el Templo de la Cruz, ubicado sobre un basamento escalonado, y el Templo de los Sacrificios.

A medida que el sitio creció, se erigieron plazas rodeadas por edificios públicos y residencias. Estas últimas, asociadas a una élite económica, contaban con áreas de almacenamiento para productos como la sal, alimentos y agua. La producción salinera fue un elemento esencial para Xcambó, con un auge que se mantuvo incluso después de la época prehispánica, ya que las salinas de Xtampú, cercanas al sitio, siguen en funcionamiento hasta hoy.
Un centro de comercio, religión y peregrinaje
Además de su importancia comercial, Xcambó fue también un lugar de culto y peregrinaje. Durante el Posclásico (1100-1450 d.C.), las estructuras del sitio se transformaron para cumplir funciones ceremoniales. En tiempos más recientes, la capilla de la Virgen, construida sobre una antigua plataforma maya, refuerza su legado como lugar sagrado, combinando tradiciones prehispánicas y coloniales.




Redescubrimiento y estudio arqueológico
Aunque el sitio permaneció en relativo abandono durante siglos, en 1976 comenzó el Proyecto Xcambó, como parte del Atlas Arqueológico del Estado de Yucatán. Las investigaciones permitieron restaurar edificios, analizar patrones de asentamiento y ampliar nuestro entendimiento sobre la arqueología de la costa norte. Los hallazgos incluyen entierros con ofrendas de cerámica polícroma proveniente de lugares tan lejanos como Guatemala, figurillas de Jaina y piezas de Veracruz, lo que reafirma la importancia de Xcambó como un nodo comercial conectado a vastas redes de intercambio.

Un espacio de historia y naturaleza
Hoy, Xcambó combina su riqueza histórica con un entorno natural que incluye manglares y palmas costeras, creando una experiencia única para los visitantes. Se encuentra a solo 6 km de Telchac Puerto y a 40 km de Mérida, siendo un lugar ideal para explorar la grandeza de la civilización maya y su relación con el entorno natural que la rodea.

Xcambó no solo destaca como un puerto comercial y centro salinero de gran relevancia, sino también como un símbolo de la adaptación y resiliencia de los mayas ante un entorno cambiante, dejando un legado que perdura hasta nuestros días.
Fuentes: INAH, Gobierno de Yucatán, Arqueología Mexicana
Dejar un comentario